La séptima temporada de “Juego de Tronos” comenzaba con uno de los momentos más esperados por los fans de la serie: el desembarco de Daenerys Targaryen en Poniente, en concreto en Rocadragón, el hogar de su familia. La playa en la que se rodó este momento fue la de Zumaia. El paseo que siguió la reina dragón y su séquito, formado por Jon Snow y Tyrion Lannister, entre otros, hasta la fortaleza recreada mediante ordenador, es el mismo que muchos turistas hacen cada día hasta la ermita de San Juan de Gaztelugatxe.